Fic Llegando a ti/Yullen/Capítulo 24.

El timbre de las 2 de la tarde sonó. Finalmente, los amigos habían decidido reunirse en las puertas del colegio, para planear lo que iban a hacer.

-¿VAMOS A IR TODA ESTA PEÑA?- dijo Saki, viendo como todos estaban decididos.

-¡PUES CLARO, NO TE DEJAREMOS SOLA A LA INTEMPERIE!- dijo Lavi.

-Tú vas por Sora, que no es lo mismo…¬¬

Sora se sonrojó.

-¡A VER, A VER, NO CAMBIEMOS DE TEMA!- intervino Rena.-¡Tenemos que ir a por Syaoran!

-Kanda, tú no deberías…

-Moyashi, no eres mi madre para decirme las cosas, voy a ir- le interrumpió este.

-Claro, a mí si me echáis la bronca por querer proteger a Sora, y a Kanda con Allen no ¿eh?- se quejó el pelirrojo.-¿!QUÉ TIENEN ELLOS QUE NO TENGA YO!? ¿!ES PORQUE OS DAN YAOI VERDAD!?

Snake y Kanda le propinaron una colleja.

-Eres el menos indicado para hablar- le dijeron los dos.

-Cof, cof, entonces iremos todos- dijo Allen, algo avergonzado.

-Pues será mejor que no tardemos más- apresuró Sephiroth.

Rena era la que llevaba las indicaciones, ya que era la única que sabía dónde se encontraba la casa de Syaoran. Si no se equivocaba, su casa se encontraba al lado de un edificio que estaban en ruinas, ya que al final, su construcción no fue como se esperaba. Tardaron unos 20 minutos en llegar.


-¡Esperad!- dijo Rena.

Se escondieron en la esquina de la calle en la que vivía él. Una chica que Sakura reconoció enseguida, estaba tocando la puerta del edificio donde vivía Syaoran.

-¡ES LA PUTA DE….!

Todos le taparon la boca. Efectivamente, Lenalee se encontraba allí.

-¿Quién es?

-Hola señora Li, soy Lenalee ¿está Syaoran?

-Claro cariño, espera que ya abro la puerta

Y automáticamente, la puerta fue abierta tras un pitido. Cuando entró liberaron a Sakura.

-¿!Qué hace esa ahí!?

-¡Hombre, es su PROMETIDA!- dijo Rena.-Igualmente, da igual que esté, nosotros vamos a entrar.

-Pero espera…Sakura no entrará sola- avisó Saki.

-¡Somos demasiados como para entrar!- explicó Allen.

. . . .

-¡PIEDRA, PAPEL O TIJERA, SACA LO QUE QUIERAAAAS….!- decían los tres hermanos.

-¡JODER QUE MI FUTURO MARIDO ESTÁ CON LA PUTA!- gritó Sakura.

-¡Alleeeeeeeeeeeen tú puedeeees!- animaba Lavi.

-¡ME DA IGUAL QUIEN GANE, PERO VENGA, SEGUID!- dijo Snake.

Kanda y Sephi suspiraron.

-¡Bueno, entro yo sola!- decidió la hermana menor de las Walker.

Al final, tomando esa decisión más justa para todos, Sakura se dirigió hasta la puerta. Realmente, sentía un poco de miedo presentarse de aquella manera ante los padres de Syaoran, alegando que amaba a su hijo, a pesar de que tuviese prometida, y que estaba en contra de ello. Respiró profundamente, y, dirigió su mano para apretar el botón cuando…

-¡SAKURA, CUIDADO!

De repente, sintió una mano que le tapaba la boca y le sujetaba ambos brazos, impidiéndole moverse. Lo único que podía hacer era patalear, pero de poco le servía. Vio como sus hermanas y los demás venían corriendo a por ella, pero la adentraban en el edificio de en frente, el cual Rena había dicho que estaba en ruinas.

-¡Sakura!

El desconocido, comenzó a correr escaleras arriba, subiendo los 8 pisos que constituían el edificio. Rena iba a entrar, pero Saki se lo impidió.

-¡Rena, tú ve a avisar a Syaoran!

-¡Ni hablar, yo también voy a ayudar a Sakura!

-¡No, tú debes de avisar a Syaoran!- Rena se quedó quieta en su sitio, sorprendida ante las palabras de su hermana, sin saber qué hacer.-¡Tranquila, nosotros nos encargamos de esto!

Le costó mover sus piernas, sin embargo, logró hacerlo, sin mirar atrás.

Los demás habían entrado ya al edifico. Iban a dirigirse al segundo piso, cuando entonces, Lavi y Snake, se quedaron atrás. Un chico delgado, de pelo negro, y ojos dorados. Soltó una carcajada al ver a sus dos oponentes.

-¡Vaya, vaya, parece que me han tocado dos por el precio de uno!- dijo.

-¿Y tú quién demonios eres?- preguntó Snake.

-¡Debitto y Jasdero a su disposición!

El que había dicho eso, había aparecido tras unos escombros. Snake, visiblemente cabreado, cogió una vara de hierro que había en el suelo.

-No será una M37, pero creo que esto me servirá

Lavi cogió otra.

-A mí no es que me vaya esto de luchar…pero..!tengo que aparentar frente a Sora ~!

-¡JODER LAVI, PONTE SERIO COÑO!

Los que se hacían llamar Debitto y Jasdero, sacaron dos pistolas cada uno.

-¡Que comience la fiesta!- dijeron los dos.

Saki, Sephi, Kanda, Allen y Sora, seguían subiendo los pisos. Iban ya por el sexto, cuando repentinamente, apareció una mujer de cabellos rubios, y otra chica más o menos de la misma edad que ellos.

-¡Vaya, Tikky-san nos ha dejado con muuuuucho trabajo!- dijo la chica.

-Mimi, no te distraigas, tenemos que encargarnos de estos mocosos

-¿!QUÉ ME HAS LLAMADO TÚ, RUBIA PUTONA!?- le gritó Saki.

Sephi se interpuso, colocándose frente a Saki.

-¿Quién eres?

-Tu señora de la muerte- contestó la mujer rubia, ocasionando un disparo.

Por suerte, logró esquivarlo, al igual que Saki.

-¡Neeee, yo también quiero, señorita Lulubell!

Unos discos de metal, muy afilados, se dirigieron a Sora, haciendo que esta se agachase, para no perder la cabeza.

-¡Chicos!- gritó Allen, dispuesto a ayudarles.

-¡Allen, tú vete a por Sakura!- dijo Saki.-¡Nosotros nos encargamos de ellas!

-¡Pero…!

-¡Vamos!- dijo Kanda, agarrándole del brazo.

Y sin más remedio, siguieron subiendo.

*Mientras con Rena*

Tocó el timbre más de una vez, con mucha prisa, hasta que le contestaron.

-¿Sí?

-¿Señora Li? ¿Por favor, está Syaoran?

-Sí, pero, está con su…

-Ya sé que está con Lenalee, pero por favor es urgente- pidió, con voz ahogada.

Silencio.

-Está bien, pasa

Rena subió con mucha rapidez las escaleras, hasta que llegó al piso correspondiente de Syaoran. Vio que la puerta ya estaba abierta para ella. Entró sin más, encontrándose con su madre.

-¿Ocurre algo?

-¡Necesito ver a su hijo cuanto antes!

-Madre ¿quién está ahí?

Syaoran apareció por la puerta de su habitación, extrañándose al encontrar a su amiga.

-¿Rena?- sus ojos estaban muy abiertos.-¿Qué haces aquí?

-Syaoran, yo…

-Eso mismo pegunto yo- dijo Lenalee, tras él. No la había visto.

Rena la ignoró por completo.

-A Sakura la acaban de secuestrar

La información creó en Syaoran un estado de shock que duró unos segundos. Seguido de eso, su reacción fue la siguiente: ir corriendo con Rena, dirigiéndose a la puerta de su casa.

-¿Syaoran, adónde vas?- preguntó Lenalee.

Se paró en seco. Rena pensó que no contestaría pero fue todo lo contrario.

-A salvar a lo que más quiero Lenalee, y no estoy dispuesto a perderlo- respondió, serio, y decidido.

Delante de ella.

Delante de su madre.

Dispuesto a recuperar lo que creía perdido.